Bogotá, 14 de marzo de 2013
PROT: 3.4.1-01
Su Santidad
FRANCISCO
Santa Sede
¡Escuchemos a Dios donde la vida clama!
Este lema de la Confederación Caribeña y Latinoamericana de Religiosas y Religiosos inspira el saludo que le hacemos llegar con motivo de su vocación como Obispo de Roma y Papa de la Iglesia Católica, a nombre de la Presidencia de la CLAR, sus Conferencias Nacionales y la Vida Religiosa de todo el Continente, porque constatamos que el Dios de la vida ha oído las súplicas con que nos hemos unido a la preparación y la realización del cónclave que lo ha elegido.
Hemos recibido con inmensa alegría esta noticia y como un regalo del Espíritu Santo para la Iglesia de estos tiempos. Su origen latinoamericano, su condición de religioso jesuita, el nombre de Francisco que evoca la sencillez del pobrecillo de Asís, el alma misionera de Francisco Javier, la mansedumbre de Francisco de Sales… son todo un signo de su identidad y, al mismo tiempo, un llamado a nuestra realización eclesial y consagrada, a nuestra vuelta a las fuentes evangélicas, y una confirmación de nuestro amor por los pobres, cuyos rostros sufrientes son para nosotras/os los rostros sufrientes de Cristo.
La cercanía al pueblo de Dios que han caracterizado su ministerio presbiteral y episcopal y los gestos de simplicidad con que saludó ayer a la multitud de la Plaza de San Pedro los leemos como un signo de su deseo de hacer realidad el sueño de Juan XXIII al convocar el Concilio Vaticano II: la Iglesia de los pobres.
Acogemos la invitación que nos hizo antes de impartir su primera bendición urbi et orbi: pediremos a Dios permanentemente por sus intenciones, su salud, las luces del Espíritu Santo y la fuerza de su gracia. Con sentido de pertenencia eclesial, y el mismo respeto y obediencia que Benedicto XVI prometió a su sucesor, le aseguramos nuestra cercanía y nuestra docilidad.
Con nuestro esfuerzo por hacer de la Vida Religiosa de América Latina y el Caribe una Betania: casa de encuentro, comunidad de amor y corazón de humanidad, tal como nos lo hemos propuesto en el actual Horizonte Inspirador, queremos contribuir a partir del encuentro personal y comunitario con Jesucristo vivo, a la implantación de una Iglesia centrada en la Palabra de Dios y trasmisora de la fe por medio de la Nueva Evangelización,.
Pedimos a Nuestra Señora de Guadalupe, Estrella del Mar y de la Evangelización, que siga siendo su compañera de viaje, y la nuestra, por el mar de la historia y los caminos de la fe.
Filialmente,
Hna. Mercedes Leticia Casas Sánchez, F.Sp.S. P. Gabriel Naranjo Salazar, CM
Presidenta Secretario General
